domingo, 22 de mayo de 2016

THE ROLLING STONES: 50 AÑOS DE SUS MAJESTADES SATANICAS


Por: Luis Ego

Es muy difícil escribir, a cerca de una banda de rock and roll, tan longeva, tan vigente y tan apasionada como lo es The Rolling Stones. Los he escuchado desde hace treinta años, cuando mis padres ponían los fines de semana regularmente, el acetato de best of…y una y otra vez estaban en mis oídos esos viejos temas: Ruby Tuesday, She´s a Rainbow, Jumpin´ Jack Flash, Honky Tonk Woman entre otras más, que las disgustaban con una plática y algunas cervezas para amenizar, mientras yo me peleaba con el Atari jugando Pac-Man, recuerdo muy bien que por la tv pasaban un viejo comercial de Brandy Viejo Vergel y de fondo una rola maravillosa de los Stones, Let´s Spend The Night Together, de mis favoritas.

Los vi en vivo en el Autódromo Hermanos Rodríguez –ahora Foro Sol- solamente los días 14 y 16 de Enero de 1995, (aunque tocaron el 18 y 20 también) teniendo como teloneros a –mis- Caifanes (previo a su despedida final). El disco a presentar de los “Ruquis Stones” fue el Voodooo Lounge. Exquisito concierto y para muchos memorable porque para ese año, Mick Jagger, Keith Richard, Ron Wood y Charlie Watts ya andaban en los 50 de años de edad y se veía muy complicado su regreso a los escenarios, entonces era el momento ideal para tal vez verlos por primera y última vez en nuestro país. Temas como Brown Sugar, I Can´t Get No (Satisfaction), Angie, Love Is Stronge, The Worst, Street Fighting Man, Not Fade Away, Angie, Gimme Shelter, entre otras fueron parte del platillo, yo contaba con escasos 15 añitos y en mi memoria este show.


Para el 7 y 9 de Febrero de 1998, ¡Sorpresa! OCESA nuevamente trae a sus Majestades Satánicas al Foro Sol, en esta ocasión presentando el fabuloso “Bridges To Babylon Tour”, y para amenizar la velada rocanrolera, el grupo mexicano telonero y más adhoc para la ocasión: El Tri, un agasajo en toda la extensión de la palabra. En esta tour se aventaron a tocar Flip The Switch, Anybody Seen My Baby, Start Me Up, You Can´t Always Get What You Want, y los covers Little Queen de Chuck Berry y Like A Rolling Stone del maestro Bob Dylan, pegados con You Got Me Rocking en un escenario justo en medio del estadio, fue una fiesta de júbilo y más aún cuando interpretaron Sympathy For The Devil, una locura, con el coro de más de 50 mil fanáticos, quienes estábamos comulgando en las entrañas del infierno recibiendo el cuerno y el trincho del diablo, era mi bienvenida a los 18 años, ahora sí darle la bienvenida a lo que vendría en mi camino.

La tercer es la vencida: The Rolling Stones oootra vez en México, año 2006. “A Bigger Bang” fue el tour que trajo a los británicos a nuestro país, la sede, fue la misma que en sus anteriores presentaciones. Un solo show en el Df el 26 de Febrero y otro más el 1ro de Marzo en Monterrey. Irrepetibles y de igual manera majestuosos. El Hotel Four Seasons de la capital mexicana estuvo abarrotado por cientos de aguerridos fans, tratando de conseguir ver a estos ancestrales rockeros. Los Stones salieron resguardados bajo un séquito de seguridad impresionante, previo a su presentación. No hubo banda abridora en esta ocasión; directo los cuatro miembros originales subieron al stage y arrancaron el griterío de la fanaticada con temas emblemáticos como: I´ts Only Rock And Roll –but
i like it-, Midnight Ramble, Get Off My Cloud, Rain Fall Down, Brown Sugar, Happy y la inseparable Satisfaction. ¿Qué más podría pedir? ya llevaba otra anécdota de los Rolling en mi mente y con 27 años de edad bajo mis hombros.

Tras pasar diez años de ausencia, por cuarta ocasión, sus Majestades Satánicas, hacen dos shows en nuestro país, los días 14 y 17 de Marzo de este 2016. Sobre pasaron la línea del tiempo, iracundos, irreverentes, locos, icónicos, desgarbados, desatados, aguerridos, con un caparazón llamado Rock and Roll como escudo y una lengua lamiendo los corazones de la humanidad a trávez de sus canciones, sus historias. Nadie podía creer que estos vejestorios, aún podían tocar y dar lo que hace 50 años crearon en
su natal Inglaterra: Rock and Roll. Lleve a mi madre como regalo de cumpleaños –acabando el show, cumplía 58 años- lo disfrutamos, la pasamos genial, lloramos, cantamos, platicamos, la música de los Rolling Stones nos abrazó nuevamente. Ahí estaban Keith, Mick, Charlie y Ron, cadavéricos, riendo, fumando, corriendo, agitando a la multitud con rolas como: Paint In Black, Wild Horses, You Got The Silver, Brown Sugar, Satisfaction y otro puñado más de himnos. Longevos, desastrozos, sus huesos pidiendo auxilio a la vida, sus sonrisas malévolas, su piel tan curtida y qué decir de su sangre, son los Rolling Stones, seres vivientes en el exilio de la humanidad.

Terminaba la semana Stone…llego el día viernes, un calor insoportable en Cuernavaca. Iba con un amigo en su auto, andábamos por Paseo Cuauhnahuác en medio de un tráfico devastador, cuando me llega un mensaje al celular y mismo que estaba por morir su pila, “Los Rolling andan en Tepoz”…se me salieron unas lágrimas, eran casi las tres de la tarde y minutos después me envían un breve video con un texto adjunto “En este avión se van los Rolling a las 4 pm del aeropuerto Mariano Matamoros de Cuernavaca”…le pedí a mi amigo que le metiera pata, pasamos a poner gasolina a su auto, y nos fuimos vía “en chinga” al aeropuerto, entre tráfico, y un calor insoportable, llegamos y había unas treinta personas, entre fans y reporteros. Pasaron unos minutos y llego un autobús de donde bajaron todos los músicos de los stones, quienes documentaron su equipaje y algunos accesibles se
dejaron tomar fotos. En la pista de aterrizaje, un avión Easter 737, encendía sus turbinas, bajaba su escalinata y subían uno a uno los músicos. ¿Y los Stones?, pues minutos antes de las 6 pm llegaron varias camionetas custodiadas por policía federal, y efectivamente ahí venían sus Majestades Satánicas. No lo podía creer!! Llore más. Jamás me imagine ver esa escena. Me llamo mi mamá por teléfono, para saludarme, se me quebró la voz cuando le dije lo que estaba ocurriendo…a ella también. Le mande un beso y tome algunas fotos que aquí comparto para la posteridad. Ni soñar una foto con alguno de los Rollin, como dice su canción You Can´t Always Get What You Want…al menos los vi frente a
mis narices…pasaron mis 37 años de edad en breves segundos, seguramente, si regresaran los Rolling Stones, mi hijo será el encargado de continuar esta historia. Comentarios: egoluispress@gmail.com